Origen e historia de la raza
El Gran danés también es llamado Dogo alemán o Dogo danés. Estos diferentes nombres nos demuestran la controversia sobre su origen. Los antepasados inmediatos del Gran danés actual serían el antiguo "Bullenbeisser" y los grandes machos empleados para la caza del jabalí. Estos perros eran de una conformación intermedia entre un poderoso y enérgico Mastín y un Galgo rápido.
Temperamento y carácter
Es una raza con un buen carácter y una buena sociabilidad con otros animales. De todas maneras, su dueño debe tener con él una educación firme. Así el perro crecerá equilibrado y prevendremos cualquier comportamiento agresivo, particularmente hacia los extranjeros y hacia los niños.
De todas maneras, un Gran danés bien adiestrado no es un perro agresivo. Y es que posee un carácter tranquilo y comedido. Es un excelente perro guardián. Pero no por su enorme fiereza, que no la tiene. Es más su imponente aspecto y su enorme tamaño los que disuaden a cualquiera. De hecho, hablando de su fiereza, es el perro menos fiero de todos los molosos.
Características físicas
Este moloso danés reúne orgullo, fuerza y elegancia dentro de un conjunto lleno de nobleza. Es una raza grande y poderosa, pero de armoniosa construcción. Y esta nobleza y armonía de su aspecto, unido a su silueta perfectamente proporcionada y a su mirada expresiva, hace de él uno de los perros más perfectos y bellos del mundo. De hecho, es llamado "El Apolo de los perros". Y es que además posee unos movimientos armoniosos y ágiles.
El pelaje del Dogo Alemán o Gran danés es liso, corto y de apariencia brillante. Encontramos tres variedades independientes: el de pelaje leonado y atigrado, el arlequín y negro y el azul. Su piel está pegada y perfectamente pigmentada en los perros de colores sólidos. En los perros de tipo arlequín, la distribución del pigmento normalmente corresponde con las manchas.